La cena de la corte.
Parece ser que no nos encontramos con un interlocutor que el Ayuntamiento designe para relacionarse con los sindicatos. Eso es lo mismo que decir que no nos encontramos con el ayuntamiento mismo. CGT ya tuvo que abandonar las reuniones de “negociación” de RPT. No puede ser que sólo se nos pida asistencia para el hecho consumado de un reparto de premios sin el menor estudio técnico. Se reparten subidas de sueldo para unos y cambio de atribuciones para otros como si fuera un bingo. Ya están repartidos los números y los cartones. Allí los sindicatos sólo están de camareros. Después vino el acuerdo de cumplimientos de la moción sobre interinos con una huelga de hambre de por medio. Se entrega un “acta” de la misma que no contiene nada de lo dicho y para más cachondeo no está bien ni la fecha del día de la negociación. La rematadera viene cuando se celebra la sesión ordinaria del comité de Seguridad y Salud. Un órgano colegiado y que viene regulado por ley. L@s delegad@s de prevención solicitan una sesión extraordinaria del comité debido a incumplimientos graves de la ley de prevención en Infraestructuras. Entonces el sr. Presidente del Comité recuerda convocar la sesión ordinaria, por supuesto antes que la extraordinaria pese a que la premura de las mismas ya está reflejada en el reglamento que por supuesto no se cumple. El sr. Presidente decide adelantar puntos de los solicitados para el comité extraordinario al ordinario, que se celebra antes. Cual no será nuestra sorpresa cuando no se nos hace entrega de ninguna documentación en tiempo y forma de aquellos puntos que se decidieron adelantar. El delegado de CGT allí presente solicitó la votación de los presentes para incluir esos puntos en el próximo comité para que se nos entregase la documentación y poder consultarla. Y no pudo ser. En un órgano colegiado en el que se alcanzan acuerdos, se denegó la votación (la documentación ya no se había aportado). Tras solicitar don veces la votación y preguntar si allí se votaba o no, tuve que optar por abandonar la Sesión del Comité. Lo tratado y acordado allí, no ajustado al la ley, es nulo de pleno derecho. No merecía la pena permanecer más tiempo. La documentación de los puntos que sí estaba ya la teníamos. No se iba a obtener nada más.
Y… ¿qué pintan aquí las Seciones Sindicales?, pues nosotr@as no lo sabemos. Nos hacemos una idea. Las Secciones Sindicales representan el papel de aquellos y aquellas criadas que servían las mesas opulentas de las cenas de la corte que pudo ofrecer el Rey Sol. El Rey elegía los platos y los comensales, pero era necesario que un enjambre de sirvientes revoloteara alrededor de la mesa para que todo se desarrollase como debía de ser. Un enjambre de personas que tenían voz, (¿está bien todo señor?. ¿más vino?) pero de ningún modo tenían voto.
CGT, ha decidido ausentarse de esas “cenas de la corte” en la que se han convertido algunas reuniones . Todavía hay quien sigue asistiendo. Parece ser que la posibilidad de escuchar algo interesante mientras reparten el menú les mantiene en el espejismo de que también ellos participan en la cena. CGT no será cómplice de lo que se cuece en dichas “cenas”. Porque entendemos que cuando l@s trabajador@s depositaron su voto de confianza, se merecen que alguien mantenga a salvo su dignidad. Cuando seamos tratados como comensales y no como criad@s, acudiremos de nuevo a las reuniones de “negociación” abandonadas.