Se divirtieron los niños… ¡ahora que paguen! (Pinocho, Walt Disney 1940).
“Mas vale esperar, adaptar la situación a la próxima legislación nacional que esta a punto de entrar en vigor y que alguien se plantee un giro en la gestión de la plantilla municipal para gestionar el barco con sentido común…” ¡Cuantas veces en CGT habremos oído esto! Pero quien se siente a salvo en su castillo, no quiere escuchar ningún consejo.
La noticia del pasado día 15 de abril ha hecho temblar los servicios de recursos humanos de las instituciones públicas a lo largo y ancho del territorio nacional. No es baladí, que un juzgado de instrucción de lo penal haya admitido a tramite y este investigando a funcionarios responsables de las ofertas de empleo público, por ejecutar aquellas plazas ocupadas por personal interino en abuso de temporalidad en contra de sentencias y directivas comunitarias, que por si algún despistado no lo sabe, a estas alturas prevalece sobre cualquier ley o legislación nacional.
Para CGT la cuestión es sencilla, no se pueden vulnerar los derechos de los trabajadores y trabajadoras. Ya ha dicho la justicia europea que para las personas en abuso de temporalidad las Ofertas de Empleo no son la reparación a su situación. En este país, parte del alto funcionariado se exime frecuentemente de sus responsabilidades, así como de sus funciones, actuando al filo de la legalidad, actuaciones que no suelen tener consecuencias más allá de que pague la factura el que venga detrás que al final como siempre es el ciudadano. En la noticia, vemos escritas por fin las palabras “prevaricación”, “inhabilitación” y la tan esperada frase “pagas con tu patrimonio personal”. Palabras que pueden hacer añicos cualquier carrera política o funcionarial. Por fin la cosa cambia y señores, es para pensárselo dos veces.
En CGT buscamos paralelismos en otras administraciones y en este Ayuntamiento observamos con estupor unas prisas extremas en deshacerse de aquellas personas sobre las que se ha cometido abuso en su contratación. La velocidad de crucero que ha tomado la ejecución de los procesos selectivos, la “prestidigitación administrativa” que supone la aparición excesiva de puestos de nueva creación altamente remunerados, todo ello envuelto en un escenario que nunca se ha conocido en esta institución, a CGT nos hace reflexionar sobre lo mal que actúan en este Ayuntamiento.
Hay que extender urgentemente la aplicación de la justicia a este Ayuntamiento. Para CGT la paciencia tiene un límite. No podemos ser ajenos al sufrimiento de las personas. No podemos sentir empatía con quien es tan frio a la angustia de los demás. De sobra conocemos la obra que se interpreta y de sobra conocemos el reparto. Se abre un nuevo camino… ¡Andémoslo!